Bárbara Céspedes C.
Pérez Zeledón. De acuerdo con esta institución, ese año no se presentó ninguna anomalía en las ventas y se pudo controlar de una manera eficiente la venta de pólvora ilegal.
El permiso para que los comerciantes de este producto lo vendan correspondía un mes.
Además no hubo heridos de gravedad por quemaduras de pólvora.
Este trabajo se realizó en conjunto con la Fuerza Pública.