Buenos Aires. El primer decomiso se trató de nueve millones de unidades cigarrillos que decomisó la Policía de Control Fiscal del Ministerio de Hacienda, el jueves anterior en el puesto control El Brujo, recién habilitado por este Ministerio en Buenos Aires de Puntarenas.
Esto se logró tras una inspección física y documental realizada por los departamentos de Puestos de Control y de Análisis a una unidad de transporte con matrícula panameña, que incluso portaba marchamo aduanero.
Las autoridades detectaron inconsistencias que hicieron presumir que el vehículo podría transportar otra mercancía distinta a la declarada que eran mesas de comer para infantes, coches para niños y anteojos de protección facial, la cual procedía de la zona libre de Colón, Panamá.
Al hacer la apertura de las compuertas, constataron que la unidad transportaba 900 bultos con gran cantidad de cigarrillos, con lo que se estaría ante una presunta defraudación fiscal.
De inmediato coordinaron con el Ministerio Público para decomisar tanto la mercancía, como el remolque y el cabezal, que era conducido por un individuo de apellidos Barrios Santoya.
Mientras que el segundo se realizó en conjunto con la Fuerza Pública en Paso Canoas, donde evitaron el ingreso ilegal de un cargamento de 1.6 millones de unidades de cigarrillos, que venía oculto en el doble forro de un furgón con placa costarricense.
Esta acción responde a un operativo conjunto efectuado esta mañana, en atención a una denuncia ciudadana recibida mediante la línea 911.
Previa coordinación con el Ministerio Público, los oficiales de la PCF decomisaron la mercancía y detuvieron tanto la unidad de transporte como su cabezal, mismo que era conducido por un hombre de apellidos Noguera Moraga.
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