Pérez Zeledón. Este miércoles 25 de febrero, empezaron las conclusiones en el juicio que se sigue en Los Tribunales de Justicia de Pérez Zeledón.
Este día, el fiscal, José Sanders, en representación del ministerio Público solicitó 30 años para el hombre de apellidos Saborio Saborio y 25 años de presión para Blanco Prado, ambos sujetos supuestamente figuran como intermediarios en el hecho.
Además, solicitó revocar la libertad condicional que actualmente pesa sobre ambos sujetos y que se les dicte la prisión preventiva.
Los hechos se remontan al 17 de enero del 2012 a eso de las seis y media de la mañana, cuando el ingeniero salía de su casa de habitación ubicada en la comunidad Villa Ligia.
El profesional recibió impactos de bala en el abdomen y en uno de sus codos.
Posteriormente, el 4 de julio de ese mismo año, se dieron cuatro allanamientos simultáneos, que dieron con la detección de cuatro sospechosos.
Los sospechosos, son el empresario de apellidos Blanco Solís, sobre quien pesa una orden de captura por la ausencia en este juicio y quien se presume fue quien dio la orden.
El ingeniero, era el encargado de otorgar los permisos en el municipio generaleño y al parecer, negó en varias ocasiones la autorización para la construcción de una estación de servicio en El Hoyón.
La Fiscalía cuenta con el testigo de la corona, quien al parecer, fue quien brindó el servicio de taxi informal al gatillero, hombre que tampoco está presente en el juicio.
El debate continuará este jueves a las siete y media de la mañana en la sala dos de los Tribunales.
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