Buenos Aires. Tras varios meses de lidiar con barro y escombros, la comunidad Indígena de Rey Curré empieza ver como sus principales aulas recobran vida que pronto se llenaran de alegría, risas y esperanzas de decenas de estudiantes que iniciaran el curso lectivo 2018.
Las autoridades competentes avalaron la reconstrucción de al menos cinco aulas donde atenderán a los estudiantes, aunque se espera que pronto se habiliten más recintos para atender a más educandos.
Los fondos para atender estas obras restauradoras provienen de las recientes actividades organizadas por la comunidad más el aporte del MEP y otros voluntarios.
Sin embargo, aún queda mucho por hacer para levantar de nuevo este colegio Indígena, que espera pronto vivir su normalidad.
Otro de los cambios en esta institución educativa es el nombre, pues pasó de llamarse Liceo Rural Yimba Càjc a Colegio Indigena Yimba Càjc, esto con el fin de poder incorporar nuevas asignaturas para sus estudiantes.
Esta modalidad les permitirá incluir materias como Educación Física, Idioma ancestral y Música entre otras.
De acuerdo a la Dirección de este Colegio, «la matrícula se ha mantenido relativamente estable y se espera sumar nuevos ingresos a partir de este lunes cuando ya todos regresen a sus aulas».
Mientras tanto, el grupo de vecinos que trabajan arduamente en el proceso de reconstrucción continúan sus labores y esperan que las ayudas lleguen para poder habilitar la mayor cantidad de aulas y espacios que sirven para atender el curso lectivo 2018.
«Queda muchísimo por hacer, y por cada paso que se da, se evidencia que se necesita más recursos, más materiales, más manos solidarias que se sumen a este proyecto de reconstrucción, que beneficiará a muchos estudiantes de escasos recursos que sueñan con un mejor porvenir a través de la educación», mencionó Uriel Rojas, vecino de esta comunidad.
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